Don Damaso Delgado Guede (Relojero)

   Entre las últimas entradas, se han prodigado las de relojes y bicicletas; pero puedo aseguraros que no ha sido de ninguna manera intencionado.

   Os comentaba hace pocos días, que me llamaba la atención, que ciertas profesiones; concretamente me refería a las de: fotógrafo, dentista y relojero, habían tenido como máximos representantes, a profesionales extranjeros. Recordábamos a Barbosa, Da-Cunha, Bodmer y Wiget como relojeros; y precisamente este último sin quererlo me ha llevado a descubrir al que posiblemente fue el comienzo de una saga de relojeros que continua activa en la actualidad, (el nieto de Don Damaso, continua haciendo trabajos de relojero, en Barcelona, por cierto por lo que tengo entendido, sus trabajos continuan siendo de una altisima calidad ), Don Dámaso Delgado Guede.

   Los datos que tengo de don Dámaso, lo sitúan retornando de Brasil, en el nacimiento del siglo XX, allí había adquirido amplios conocimientos del Arte de la Relojería, los cuales le hicieron merecedor de una oferta de las autoridades brasileñas, para dirigir una escuela de relojería que rechazo por su deseo de regresar a Galicia.

   Las intenciones de Don Dámaso eran de instalarse en la populosa Vigo, pero finalmente opto por quedarse en Maceda (la causa que motivo tal decisión, fue el hecho de que “alguien” dudara de su profesionalidad y habilidad como Relojero).

   Parece ser que esa decisión, tuvo como consecuencia el declive del taller del suizo Oscar Wiget. El último dato sobre Wiget, es del año 1920 y hablan de su posible regreso a Suiza, después de que Dámaso adquiriera la mayor parte de sus pertenencias.

   Intentare que el actual representante de la saga nos cuente anécdotas de don Dámaso; de momento disfrutar de esta hermosísima fotografía que me ha autorizado a mostraros, del primer relojero de la familia delante de su mesa de trabajo en el taller de Maceda; aproximadamente año 1900.