Este rincón de Ourense, lo conocemos todos, aunque menos que antes; y ese es precisamente el motivo de mi entrada de hoy.
Al fondo veis que el edificio donde estaba Calzados Arca, aun no había dejado sitio para que se instalara el nuevo que hoy ocupan los Hermanos Barros; (el antiguo parece que no tenía “derechos “ para ser conservado y deja hueco a uno más moderno, mas cómodo y con más capacidad). A su lado esta un edificio que se mantiene en pie ya desde aquellas, eso si antes el local comercial lo ocupaba Bazar Nieto, (cuanto me gustaban a mí los bazares, lo mismo comprabas en ellos un mueble castellano, que una lámpara de strass, o le dejabas encargados a los Reyes Magos los regalos que querías que te trajeran); y ahora una “insípida” entidad bancaria.
No se ve, pero es seguro que el edificio de la esquina del Paseo, aun estuviera ocupado por la tienda de Simeón, después vendría el tiempo del Hotel Padre Feijoo, otros negocios y próximamente una clínica dental???.
Donde va que Gelasio cerró el bar y dejo hueco para Colchones Ulloa; al menos la Coruñesa mantiene el nombre aunque ahora de confitería nada, ahora cafetería. También se fueron Vitan, Guante Varade, La Camisería, los Baladrón, y hasta el Banco Simeón, (por cierto cuan equivocados estábamos al pensar que las entidades bancarias no tenían problemas; si de vez en cuando miráramos hacia atrás, recordaríamos casos como la Banca Romero, Banca Fuentes, o el más cercano en el tiempo de Sofico, o los filatélicos. Deja el tema….).
Sigamos; esos cambios son en los edificios, en los negocios y debemos admitirlos, incluso hay quien diría que aplaudirlos en aras del Progreso; me parece perfecto también que los coches tengan muy restringido el paso por esta zona, (el 600 y el Simca 1000 incluso adornaban el paisaje, pero porque eran pocos, hoy sería impensable -coches en el Paseo-).
Lo que a mí me da mucha envidia, es ver lo animada que estaba la calle en aquellos tiempos; y puedo aseguraros (yo vivía enfrente), que era algo continuo, durante la semana lo mismo que el fin de semana, esta zona era de las más concurridas; a lo mejor la culpa la tenían los fotógrafos que allí estaban a la caza del cliente????. ¿Hoy?, ¡ay!.