"Hermanos Martinez - Risco" (Federico Roman Alonso)

A pesar de ser la última colaboración que he recibido, se adelanta en la publicación, dado que me ayuda a saldar una deuda con esta familia, que de momento, poco ha aparecido por el blog, y coincidiréis conmigo, que Ourense sin los Risco, Macías, Alonso, Elices, Román, Fitera y demás ramas del árbol genealógico, no sería el mismo.
Agradezco a Don Federico Román Alonso, esta instructiva colaboración, que abusando de su amabilidad, espero no sea la última.

“Hermanos Martínez-Risco”

Los dos personajes retratados en esta fotografía, cuyo negativo en cristal está roto, son el primogénito y el benjamín de los siete hermanos Martínez-Risco y Macías: Manuel, Luis, Casilda, José, Remedios (mi abuela), Jesusa y Sebastián.

El mayor, Manuel, ejerció de primogénito al morir su padre en 1909, y después de una estancia en Holanda, y de trabajar en los laboratorios de la JAE y en la Universidad Central, se llevó al benjamín, Sebastián, a vivir con él en sus dos destinos: Zaragoza, donde fue catedrático de Acústica y Óptica de la Facultad de Ciencias (siguiendo Sebastián los estudios de Derecho que había comenzado en Santiago), y Madrid, catedrático de la Universidad Central, donde se licenció el hermano pequeño.

Esta unión se vio truncada, como en tantas familias, con la guerra civil. Manolo, diputado por Izquierda republicana, tuvo que exiliarse en Francia, allí logró ser nombrado Maître de Recherches del CNRS en la Sorbona (falleció en 1954), y Sebastián, después de trabajar como magistrado, fundó un bufete de abogados; sus inquietudes literarias desde la infancia: poesía, novela y ensayo, hicieron que fuese elegido Presidente de la Real Academia Gallega en 1960, siéndolo hasta su muerte en 1977.
Aparte del amor fraternal, los unió el mismo sentimiento hacia Galicia, y desde hace unos años se volvieron a abrazar dando el nombre a una calle de Orense, como su tío Marcelo Macías, su primo Vicente Martínez-Risco y su pariente el poeta Castor Elices.
Los trozos del negativo en cristal se pueden apreciar, como los dos hermanos, de nuevo unidos.