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23/3/16

Aquella Semana Santa


Los oficios religiosos de la Semana Santa, han ido adaptándose a los tiempos; hoy al margen de las procesiones, El Burrito, Santo Entierro y Caladiños, que recorren las calles de la ciudad, el resto de los Santos oficios, se realizan en la Catedral o alguna de las parroquias de la ciudad.

   Como se ve en la postal que edito José Pacheco, en los años 20´s, la Plaza Mayor era supongo que por capacidad y cercanía a la Catedral  y varias parroquias, el lugar elegido para uno de los actos centrales “El desenclavo” o liturgia de las “Siete Palabras”.
   También era el punto de partida de la procesión del Santo Entierro, la cual como dato anecdótico, entraba en la catedral por la puerta Norte y salía por la sur  para volver a terminar el recorrido en la Plaza Mayor.

Aquellas procesiones, no presentaban más que dos pasos, El Cristo y La Dolorosa, pero aun así, conseguían congregar a la práctica totalidad de la ciudadanía; pasados los años, la época de mi juventud, los pasos eran al menos el triple y probablemente aquellos años setenta fueron los de mayor esplendor.
Entre el 74 y 76 tengo el recuerdo de haber vivido la procesión más multitudinaria del Santo Entierro y la menos concurrida, (la lluvia fue la culpable), en la primera aquellos años eran los primeros en los que se me dejaba ir con los amigos (tenia yo doce años), en lugar de en familia, y con más ganas diversión que fervor religioso, salimos de la Catedral muy formales, jugando con el cirio, forzando la caída de la cera, y en las paradas intentando que le cayera en los zapatos al que iba delante; al poco tiempo y después de escuchar las riñas de algún adulto, detención “a verlas pasar” y vuelta a ponerse en la fila, el caso es que todo Lepanto y Santo Domingo eran dos filas interminables de fieles con sus cirios en la noche Ourensana, una imagen impresionante, al tiempo que “casi” toda la gente permanecía en silencio. Aun se me viene a la memoria el sonido que hacían los seminaristas portando la urna del Cristo (creo que es de Santa María Madre), al apoyar las andas que utilizaban para los relevos, la banda del Regimiento Zamora 8, (no sé si ya al mando del Subteniente Caamaño y el Brigada Paris), junto con la Banda Municipal se encargaban de marcar el paso y dar el aire de solemnidad requerido. Ahora que lo pienso, este año la música va a ser algo complicado, la banda del Regimiento hace mucho tiempo que nos abandono, y la Banda Municipal……
Bueno lo que quería contaros, es que estando ya las primeras unidades cerca del cruce donde hoy esta la lechera, mis amigos y yo subimos por la actual Concordia hasta Santo Domingo, y aun no había llegado allí el final de la procesión, ¡eran otros tiempos!!!!!.


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