Crónica negra de Ourense XIII, "el crimen de Folgoso"

   Hace ya muchos años que disfrutaba leyendo los casos que la excepcional Agatha Christie planteaba con sus personajes; Poirot era un autentico genio, pero personalmente la señorita Marple, Miss Marple era quien no permitía que abandonara uno de sus relatos sin saber el final. 

    Para mí lo más sorprendente era descubrir que la solución a las investigaciones, pasaban por el recuerdo de un hecho acaecido en su St. Mary Mead; ahora que empiezo a conocer los entresijos del pasado de nuestro  Ourense, me resulta más sencillo de comprender.

   La prensa gallega recoge en sus titulares del 19 de junio de 1888 la indeseable noticia de que en el pueblo de Folgoso distrito municipal de Esgos, apareció enterrada en un huerto propiedad de Francisco Labrador F. la hija de este, de 17 años de edad con señales de muerte violenta.

      Las primeras investigaciones señalan al padre de la víctima como principal sospechoso.

   Poco a poco, parece ser que las sospechas se van confirmando, y surge un nuevo motivo de acusación: desde hace tiempo la hija sufría el acoso de su padre, y las pruebas forenses corroboran que la niña había sido forzada en repetidas ocasiones.  Con esos condicionantes, se señala la fecha para el juicio oral que se celebrara desde comienzos de septiembre; intervendrán  como Juez Instructor, el  Sr Lago, y el fiscal será el Sr Moscoso.

   En el juicio se demostró que Francisco llevaba tiempo abusando de su hija Maximina y que por algún motivo que no llegó a descubrirse decidió estrangularla y enterrarla en el huerto de su casa en el pueblo de Folgoso.

Petición de indulto

 El 15 de ese mismo mes de septiembre concluyen las sesiones solicitándose la pena de muerte para el reo; siendo confirmada la misma por la audiencia Provincial días más tarde.
 El último paso de la justicia se produce cuando la Audiencia nacional el 12 de diciembre del 1888 confirma la sentencia.
Queda todo en manos del Gobierno que podría conceder un indulto. 

Acuse de recibo de la casa Real

   En la ciudad se alzan voces contrarias a la pena de muerte que encabezadas por don Luciano Cid Hermida director del Álbum Literario, el periodista y escritor Alberto García Ferreiro y el influyente orensano Benito Fernández Alonso; reúnen en poco tiempo 600 firmas solicitando se le conmute la pena capital. Todas las gestiones resultan infructuosas, y como último recurso se envían telegramas a la reina para que interceda; sin que sus demandas sean atendidas por el gobierno, al no encontrar este, justificaciones suficientes para la concesión. 

Ultimo intento,telegrama al Ministro

Es así como el 2 de de abril de 1889 a las 8,35 Francisco L.F. es ajusticiado en el cadalso situado para la ocasión en las proximidades del Polvorín; el verdugo (ejecutor Publico) designado para la ocasión fue Jorge Mayor. 

Hacía más de 40 años que no se llevaba a cabo una ejecución en nuestra ciudad y según mis datos actuales, esta fue la última ejecución a Garrote llevada a cabo en Ourense.