El Claustro de San Francisco (re apertura)

Años 20 (fotografía de Norberto Tabares)

   Me vais a permitir que en contra de mi costumbre, (sabéis que no me cuesta nada agradecer y dar merito a los responsables), no de las gracias a nadie, por la ansiada apertura  del Claustro de San Francisco; para ser realista lo que tendría que hacerse, sería buscar responsables de tan nefasta gestión, e inhabilitarlos (al menos)  por su demostrada incompetencia.

   Pero será mejor que tengamos la fiesta en paz. 

   Hoy después de ….. se reabre el valioso claustro de San Francisco; algunos ourensanos entre los que me encuentro, durante una etapa de nuestra vida, lo veíamos a diario, y el que mas y el que menos contribuyo “voluntariamente” a su limpieza; a otros les trae recuerdos del día de su boda; y otros muchos debido al prolongado cierre lo verán como algo novedoso.

Años 50

   A modo de celebración, he tomado prestadas estas imágenes, que muestran tres etapas diferenciadas en la historia del Claustro. (Al menos falta una que es la inicial, la de convento de la venerable orden Franciscana, pero comprenderéis que no tenga fotografías de “esos” años). La primera, que me deja Tabares, muestra un claustro, que por las mesas que se ven detrás de esos recios caballeros, hace pensar que se utilizaba como comedor de tropa, o algo similar. Las construcciones anexas que muchos conocimos, comedor, 1ª Cía. Planas, (edificio colindante con el muro del cementerio), la zona de Reclutamiento, (hoy sustituido por lo que en su día será el archivo y/o la biblioteca pública), son de fechas más recientes, y hoy han desaparecido dejando paso a las nuevas construcciones que algún día tendremos en ese complejo cultural.

   La segunda etapa fue la más tranquila para esas paredes, a pesar de su uso militar; ya que las visitas aunque permitidas no eran masivas; y además como ya he comentado toda la tropa colaboraba más o menos “voluntariamente” en su limpieza y embellecimiento.

   La tercera foto que tomo prestada al amigo Puga Vilarchao, muestra las escaleras anexas al claustro en el estado en que han permanecido durante todos estos años.

Años "perdidos" "fotografía de Puga Vilarchao)

 Si hoy no podéis acercaros por allí, intentar hacer un hueco en vuestras agendas para los próximos días y hacedle una visita; el entorno merece la pena.