Fotografía propiedad de "Numismática Álvarez" |
Descartada también la opción de cualquier inicio de campaña reivindicativa en pro de la recuperación de estos nombres; (no están los tiempos para ocuparse en estos detalles, y reconozco que los afectados posiblemente no se sintieran muy contentos por los inconvenientes que trae consigo un cambio de nombre de calle). A lo que sí, me niego a renunciar; es a publicitar esos nombres, a fin de evitar que se pierdan definitivamente.
Alba, Rapagatos, Quebracús, Corredoira, rúa Nova, el campo del desafío, o porque no? O Carreiro dos Defuntos; son algunos de esos nombres, referidos a calles de la ciudad. Ya sé que en algunos casos, (y aquí siempre nos acordamos de la céntrica …. ya no sé cómo llamarle, digamos Cardenal Quiroga- Alejandro Outeiriño), ha sido tal el baile de nombres, que no sabríamos siquiera cual recuperar.
Pero bueno a lo que vamos hoy; no solo calles son las que han sufrido esos cambios, el crucero de la Magdalena, (hoy en esa plaza), fue la Cruz de Termino, en clara alusión al fin de los días de los ajusticiados por la ley; que según leí en algún texto, en ocasiones servían de abono a los arboles de la zona; debía de ser truculento en exceso, pero a buen seguro que más de uno se lo pensaría antes de delinquir, al recordar esa visión. El Palacio de los Oca Valladares, es la actual sede del Liceo Ourensano, la C.E.O ocupa la casa Palacio de los Gayoso, y el colegio de La Purisima, El Pazo de Los Reinoso.
Y por fin llegamos a la fotografía de hoy, (menudo rodeo, alguno le llamara rollo, pero bueno…), que muestra mi vieja parroquia, Santa Eufemia, (por cierto ya sabéis que hay dos, y la explicación es un poco enrevesada pero…).
La fotografía me la presta el amigo Mazaira, y creo no equivocarme si la datamos alrededor de 1937, cuando después de mucho tiempo planificándolo, se ejecuto la ampliación de la calle: como llamarle?, canella que… no, no, Coronel.. no, tampoco, plaza de Santa Eufemia, puede que sí, aunque más de uno le llama plaza del Miudiño, y todos le entienden; si os fijáis la fachada de la iglesia estaba sin terminar, pero es que los Jesuitas decidieron que en aquellos momentos no merecía la pena terminar la parte superior; al estar tan encajonada entre edificios no era posible observar un trabajo de calidad; de hecho según parece esa fue también la causa por la cual se hizo con forma cóncava la fachada, mejorar en lo posible su estética a la vista. Pero bueno, eso que sean los entendidos los que nos lo cuenten.
Aquí os dejo la fachada sin torres de la Iglesia de La Compañía de Jesús
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